9 de enero de 2011

Un martes mas Y un Martes Menos

Desde Pequeño, fui muy bueno para correr, y no porque corriera excepcionalmente, o porque fuera veloz, sino porque sabía cuando correr o cuando simplemente acelerar el paso.





Siempre he creído que el correr no se trata simplemente de ser veloz, sino serlo, en el momento exacto y oportuno.

Los años transcurrieron y el tiempo hizo lo más predecible que puede hacer, avanzar con la misma velocidad que hace millones de años.

Por alguna extraña razón, había recordado a cierta persona con la que estuve solo aquella noche de celebración desenfrenada y de felicidad absoluta, no recordaba el nombre o el cuerpo, es más, no recordaba ni el éxtasis, solo recordaba el olor y no el olor que expedimos los seres humanos, sino el olor artificial con el que nos impregnamos, una fragancia que se produce al por mayor y que puede portarla cualquier persona.

Ya antes lo había expuesto, la relación de fragancia-persona y de cómo esto iba relacionado a un sentimiento arraigado a la misma, pero esta vez, era diferente, la persona no se me venía a la mente, solo unos 32 kilos de recuerdos que golpeaban mi mente, recuerdos de toda esa noche y de lo que estaba celebrando y de cómo, sin importarme nada, me dejé llevar y por un momento, fui feliz.

Como lo dije, no recordaba el nombre o su voz, lo que mejor recuerdo de el final de esa noche, es que corrí, me aleje sin decir adiós y no me arrepiento, simplemente me gusta jugar con la idea del “qué hubiera pasado sí…?”.

Justo ahora que camino sin rumbo y que no hay, precisamente, emociones de ese estilo, me llega a mi nariz ese aroma, quizás, no como tal, y yo solo lo estoy inventando tratando de encontrar una escusa para alejarme mentalmente de mi situación actual y de correr de esta situación incómoda, donde tengo que encajar en una nueva sociedad, con una nueva y extraña persona…



[NDE] Esto es una historia, bastante chafa, aburrida y todo eso, pero me gusta escribirla, me gusta contarla y aunque dije que la anterior era la ultima parte, pues no, hay mas partes.

[NDE2]Consta de varias partes, que, aunque no son necesarias, si estaría chido que las leyeran. Aunque, ya nadie lee este pedazo de blog.

[NDE3] Parte 7, Parte 8, Parte 9, Parte 10, Parte 11 y Parte 12 Si, empieza en la Parte 7… Las primeras 6 partes, corresponden al cuento de conejo y luna.

Desde el centro derecho del extremo izquierdo de su zona baja del teleencefalo altamente desarrollado de Fhercho, sale, hoy, calientito, la parte INEDITA de la historia:

UN MARTES Y UN DESPUES

Una mesa, un café latte, grande, sin azúcar y no muy caliente, un danés de nuez y un cigarrillo natural, era el perfecto desayuno para Marte, acompañado claro de las noticas a las que no ponía atención y de un frio que le hubiera gustado no ponerle atención. Era Noviembre, de un año impar, y tal pareciera que, ese que estaba sentado ahí, no era el Marte de hace 3 años, aquel que veía las estrellas y la gastronomía del mismo modo y que estaba tan enamorado de un amor tan imposible como el infinito mismo.

Marte se asomó por la ventana, solo para ver una ciudad en movimiento atroz, un movimiento tan acelerado que pareciera desordenado, pero en el fondo, tiene un orden, un orden caótico, que la hace absorbente; Marte suspiró y al alejar la mirada de la ciudad, se dio cuenta de algo que tenia mucho sin ver, su reflejo.

Marte se puso a reflexionar en muchas cosas, entre ellas, en cómo había llegado hasta ese lugar y de cuantas situaciones y personas tuvieron que estar involucradas para que eso sucediera.

Hace 3 años…

Después de lo acontecido con Darla, Marte, conoció por capricho, error, o casualidad, a Perla, una chica, que vivía bastante alejada, y no de la realidad, sino de la zona geográfica en la que se encontraba, en ese entonces, Marte.

Perla le enseñó bastantes cosas a Marte, desde cómo olvidar a Darla, hasta como extrañar mediante un pedazo de papel, los detalles son graciosos y bastantes peculiares, pero no muy interesantes para el caso.

Perla hizo muchas promesas con Marte, entre ellas, la de no usar sentimientos, eso era cosa del pasado, la casualidad y todo eso, era lo de hoy, así que Marte, apagó su switch de sentimientos. Eso, como todos lo saben, es imposible y entre más apagado se tenga eso, mas sentimientos se mezclan.

Una de las promesas de Perla y Marte, era, escapar a Bruselas, una noche de agosto en el expreso de media noche, aunque había varios inconvenientes, a Bruselas no se podía ir en expreso desde donde estaban y ninguno de los dos hablaba el idioma nativo de Bruselas. Así que para aterrizar la promesa, se dijeron que se cambiarían de ciudad a un lugar neutral y verían si las cosas se daban, la casualidad acabaría y destaparían un especiero lleno de sentimientos.

Bien dicen, que la curiosidad no mato al gato, pero seguro la física cuántica si, y algo por el estilo casi mataría a Marte, y no tanto de un susto o de un veneno disparado por una partícula, sino, de desamor, ya que, Marte, había roto una de sus promesas, la de no mezclar sentimientos y esas cosas.

Marte decidió cumplir la promesa de cambiar de residencia y de estar en un punto neutral, para hacer muchas cosas, pero entre ellas, la de conocer a perla. Marte aceptó una oferta de trabajo, era un trabajo totalmente diferente al que tenía en la ciudad de las vacas, que, aunque era una ciudad grande, comparada con la ciudad de procedencia de Marte, La ciudad donde se encontraba el nuevo trabajo de Marte, era bastante mas grande, si bien, no la mas grande del mundo, pero si lo suficientemente grande para apantallar a cualquier pueblerino promedio.

Marte hablo con Conejo, quien no le pudo aconsejar gran cosa, ya que se encontraba sumergido en su relación con pocahontas, pero esa fue otra historia. Así que Marte le pidió consejo a su nueva más vieja actual amiga, miss L, o la señorita L.

Miss L tenía un nombre completo, pero complejo y una identidad compleja, que Marte nunca terminó de entender. Miss L venía del norte y tenía un acento raro y que Marte había conocido por azares del destino y de sus giros tan poco ortodoxos.

El último día de Marte en la ciudad de las vacas, se despidió de sus únicos 5 amigos y prometió no volverlos a ver jamás, ya que era lo que hacía comúnmente Marte.

Vendió lo que quedaba de su departamento, se despidió de Conejo y de Pocahontas, y antes de llegar a la ciudad donde se encontraba su nuevo trabajo, tenía que ir a otra ciudad, una ciudad bastante antigua, una ciudad donde llovía a cantaros a diario y que apestaba a pescado siempre, y donde la gente tenía un acento bastante peculiar.

Era inicio de año, un año par, y para Marte, los años pares no indicaban nada bueno, pero bueno. Marte se encargó de mandar a Perla una carta indicándole todo lo necesario para cumplir con su trato/arreglo y que en un par de semanas se encontrarían en la ciudad central, en ese gran distrito, que estaba a pocas horas de plan de abajo.

No fueron un par de semanas, fueron 4 meses que estuvo en la ciudad extraña esa, que no podía catalogar de ciudad, sino más bien de pueblo acuático, aprendía acerca de su nuevo trabajo como consultor astrológico y gastronómico.

Para Marte, era aburrido y bastante estresante el nuevo trabajo, pero todo era por una buena causa, ingenuamente creía.

Durante esos 4 meses, pasaron muchas cosas:

1.- Aprendió a cocinar nuevos y extraños (exóticos) platillos, con peces raros e ingredientes poco conocidos en occidente, que era de donde Marte provenía.

2.- La extraña relación que sostenía con Perla valió queso, o se fue a volar, debido a la distancia y a la indecisión de la misma Perla, cosa que devastó a Marte, pero bueno, las cosas así pasan, dijo Perla.

3.- Visito las ruinas del viejo imperio de los popotecas o algo así, cosa que le aburría de sobremanera a Marte, pero estaba solo y no tenia nada que hacer, asi que decidió ir a visitar este lugar en un domingo de ocio. Y le parecían de lo mas aburridas, estas y todas las ruinas de las antiguas civilizaciones, porque en estricto sentido eran piedras viejas sobrevaloradas.

4.- En esas ruinas conoció a una judía llamada Terán que lo obligo a darle 20 pesos a cambio de leerle la mano. Esta lectura no fue productiva porque no le dijo nada bueno, ni nada malo, solo que Marte tenía un hechizo o encantamiento raro y que con tan solo 500 pesos Terán se lo podría quitar sin el menor problema. Marte, obviamente se rehusó y no por tacaño, sino porque simplemente Marte no creía en la magia. Terán conjuró unas palabras raras y se alejó de Marte.

5.- Apareció en la ecuación reiterativa Darla, ahora diferente, con otro tono y con otra propuesta bastante tentadora.

Marte y miss L, reforzaron su amistad, ya que Miss L, había decido acompañarlo a esta ciudad, ya que no tenía nada mejor que hacer, juntos se divertían y embaucaban a gente nueva y virtual, se inventaban historias y amigos imaginarios. Les daban vida y una historia para divertimiento de un público también virtual.

Estos 4 meses que Marte pasó en este lugar, fueron eternos ya que, vestía la misma ropa, y aprendía mucho de su nueva profesión, pero le atormentaba la idea de no poder salir de ahí y de no poder concretar la propuesta de Darla y de poder también conocer la gran ciudad a la que iría a trabajar.

Concluirá…

7 comentarios:

Señorita Morfina dijo...

Me he quedado sorprendida con esta continuación :O y no precisamente por lo que narras, pero creo que ya sabes a qué me refiero.

Saluditos, Fher... nos leemos pronto ;)

Unknown dijo...

osea ni ke decir ke a mi el correr no se me da, pero en este ultimo trimestre, vi ke caminar ya es tedioso, ke camine tantos años ke pense ke me gustaba pero ya me harte.. yegue a un punto en el ke correr es una buena opcion, pero la vida me dio un mejor regalo y con estas alas ke aunke prestadas estoy emprendiendo el vuelo, vi ke volar no es tan dificil, ya no me da miedo. Me limitare a ver le panorama a muchos metros de altura como todo halcon hace......

..... dijo...

=D.. fher!!.. saludos!

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Me regañarás cuando diga que perdí tu mail :S... me invitas de nuevo?... lo siento :D

esperanto dijo...

Saludos maibroda, nuevamente de regreso a las letras.... nos leemos.